Ir al contenido principal

El impacto afectivo de la evaluación y la reprobación

 

Evaluación para todos


Columna del Consejero Editorial del Blog El Educador Reflexivo: Dr. Felipe Martínez Rizo, Investigador Educativo

En la entrega anterior de esta columna se dijo que la retroalimentación que el docente brinda a sus alumnos a partir de los resultados de una evaluación tiene un doble impacto, cognitivo y afectivo, se desarrolló lo relativo al impacto cognitivo.

Por lo que se refiere al impacto afectivo, los promotores de la evaluación formativa, como Richard (Rick) Stiggins destacan este aspecto, como puede apreciarse en la cita siguiente:

Las evaluaciones más válidas y confiables del mundo que tengan como efecto hacer que los alumnos abandonen la tarea desesperanzados no pueden ser consideradas productivas, porque hacen más daño que bien… 

Desde los primeros grados, algunos alumnos… obtienen altos puntajes en las evaluaciones y reciben altas calificaciones. El efecto emocional es que se ven a sí mismos como capaces de aprender, y se sienten cada vez más confiados… Otros, en cambio, obtienen puntajes bajos en las pruebas y reciben calificaciones malas. Esto los lleva a dudar de su capacidad. La falta de confianza en sí mismos los priva de las reservas emocionales para correr el riesgo de seguir intentando…  

Los expertos han cometido el error de creer que los adultos son los usuarios más importantes de las evaluaciones… Esta idea pierde de vista que los alumnos pueden ser tomadores de decisiones de aprendizaje más importantes… Si un alumno decide que el aprendizaje está fuera de su alcance o que el riesgo de fracaso público es demasiado grande o amenazador, hagan lo que hagan los adultos, el aprendizaje termina… es tiempo de sustituir la intimidación como principal motivación por la promesa del éxito académico para todos los aprendices, como esa fuerza motivacional. El miedo a veces funciona, pero sólo motiva a los que tienen esperanza de tener éxito. Desafortunadamente, cuando se trata de aprender la desesperanza siempre pesa más que la intimidación. Una evaluación en aula efectiva puede y debe servir para promover la esperanza en todos los alumnos. 

La consecuencia más grave que trae consigo el desaliento que producen a los estudiantes los bajos resultados obtenidos una y otra vez en las evaluaciones, como sugiere la cita anterior de Stiggins, no es otra que el abandono de los estudios, la deserción. 

Esto nos lleva a reflexionar sobre las opiniones que hay sobre la conveniencia de promover a todos los alumnos al grado siguiente al final de cada uno de los que componen la educación básica, sea cual sea el desempeño de cada uno, frente a la opción de solo permitir que sigan adelante los que alcancen en las evaluaciones cierto nivel, definido como mínimo aceptable, y hacer que los demás, los que no alcancen ese nivel, reprueben y repitan, debiendo volver a cursar el mismo grado.

La segunda opción parece razonable, y es sostenida por numerosos maestros y padres de familia, quienes encuentran ilógico que se permita pasar al siguiente grado a los alumnos que no tengan un nivel mínimo. Las muchas personas que así opinan consideran que pasar de grado a todos los alumnos, sea cual sea su desempeño, los dañará a ellos mismos, que no podrán aprender nuevos contenidos por no tener los prerrequisitos, y hará daño también a sus compañeros, al hacer que el docente enfrente la complicada tarea de trabajar con un grupo muy desigual.

Frente a esas opiniones defiendo la primera opción, con base en las razones siguientes:

  • Es bien sabido que, por la influencia del nivel socioeconómico (NSE), el rendimiento de los alumnos es desigual: en cualquier grupo, y desde hace mucho, ha habido alumnos que avanzan a buen ritmo, y otros que no lo consiguen. En 4° grado de primaria hay estudiantes que leen como se espera que hagan los de 6° y otros que tienen el nivel de 2° o de 1°. En escuelas cuyo alumnado proviene sobre todo de sectores vulnerables los avanzados son escasos, en tanto que los rezagados son muchos. 
  • Si en México se aplicara estrictamente el principio de solo promover de grado a quienes alcancen el nivel que estipulan los programas, valorados con pruebas objetivas, cada año deberían repetir grado muchos chicos, tal vez la mitad o más. Eso no ocurre, y la reprobación en primaria es solo de 1-2%, mientras que en la década de 1960 solo en 1° se reprobaba a un 25% de los alumnos.
  • En escuelas con alumnos de NSE alto sería esperable que la mayor parte de los chicos alcanzaran los aprendizajes esperados, y que solamente lo consiguiera una minoría en escuelas con alumnos de contexto desfavorable. Sin embargo, la distribución de las calificaciones que los maestros de unas y otras escuelas asignan es muy parecida, sin embargo; la reprobación es baja en todas.

La explicación de este paradójico dato es que los docentes no califican a los alumnos comparando el logro de cada uno con el aprendizaje esperado según el programa (calificación criterial, que permite juicios absolutos) sino en forma relativa, comparando el nivel de cada chico con el nivel general de sus compañeros (media del grupo), por lo que siempre haya unas notas altas, unas bajas y la mayoría en un nivel intermedio (calificación normativa, según la curva normal).

Esta forma de actuar de los docentes es razonable si, como muchas veces ocurre, los deficientes resultados de muchos chicos no se deben a falta de interés o esfuerzo de ellos y del docente, sino al pesado lastre de un contexto desfavorable. En tal caso, reprobar a medio grupo o a la mayoría de sus integrantes sería injusto, y además tendría el efecto demoledor de llevar a muchos de esos estudiantes a abandonar la escuela.

Por otra parte, nadie aboga por simplemente aprobar a todos los alumnos, sin evaluar su desempeño ni hacer esfuerzos por remediar la situación. Lo que se propone es evaluar cuidadosamente a los chicos, pero con enfoque formativo, esto es, para saber dónde se encuentra cada uno, y ayudarlos a todos a avanzar, a partir de su situación personal. Este principio debería aplicarse a lo largo de toda la Educación Básica, llevando a todos los chicos a terminar la secundaria hacia los 15 años (o la media superior a los 18 años), aunque no todos hayan alcanzado los niveles deseables según los programas de estudio, pero sin que ninguno haya abandonado la escuela.

Lo anterior no se opone a esforzarse por alcanzar altos niveles de aprendizaje con el mayor número posible de estudiantes, pero sí requiere un enfoque de enseñanza diferenciada, adaptada a las posibilidades de cada estudiante, detectada con buenas evaluaciones formativas. La heterogeneidad de los grupos es un reto para los docentes, pero también una rica oportunidad para enseñar a los alumnos a trabajar en equipos en los que los avanzados ayuden a los que van menos bien. 

La misión de la escuela no se reduce a enseñar a leer, escribir y contar; debe formar para convivir en armonía, respetar y hacerse respetar, para ser buenos ciudadanos y buenas personas. Quienes se alarman por lo que pasará con egresados de secundaria con escasa competencia lectora, matemática o en las demás áreas del currículo, deben preguntarse qué es mejor: tener una parte de jóvenes muy competentes académicamente, en tanto que muchos otros, que dejaron la escuela en secundaria, se dejaron llevar por la tentación del dinero fácil en actividades delictivas, y alimentan la violencia cotidiana, o conseguir que todos los chicos terminen secundaria (y media superior) y sean ciudadanos sanos y positivos, aunque una parte no tenga altas competencias académicas, lo que no deberá ser obstáculo para que una parte importante, mayor incluso que en la alternativa opuesta, sí alcance esos niveles elevados.

Esta opción no es sencilla, desde luego, pero es la única aceptable. Sus beneficios son confirmados por la experiencia de los sistemas educativos más consolidados. Los resultados de las pruebas internacionales, tan apreciados como mal interpretados por muchas personas, muestran que los países cuyos alumnos obtienen mejores resultados son también los que han eliminado la reprobación en Educación Básica, como los escandinavos, los anglosajones y los del Asia oriental, en tanto que los países en los que se mantienen tasas elevadas de reprobación obtienen también resultados bajos globalmente, como es el caso de países del ámbito latino en Europa y América Latina, en este último caso con la notable excepción de Cuba.


Comentarios

Entradas populares de este blog

APRENDIZAJES SIGNIFICATIVOS A TRAVÉS DE PROYECTOS

Por: Mtro. en Pedagogía, Miguel Barragán de León, Director General  Hace unos días en el Canal Once entrevistaron a un experto del Instituto Politécnico Nacional sobre los libros de texto gratuitos, él mismo afirmó que los niños no podrían aprender Matemática o cualquier otra disciplina con el nuevo modelo educativo y con tales libros. Nuestro Blog El Educador Reflexivo (ER) comparte con sus lectores algunas experiencias, saberes y conocimientos al respecto. Primero, la enseñanza gira en torno a dos grandes formas, una llamada sistematización, la cual consiste en planificar, desarrollar y evaluar las experiencias de aprendizaje por materias o disciplinas (temas o contenidos sin correlación alguna) es decir, aprendizajes meramente escolarizados. Otra, llamada globalización, donde se planifica, desarrolla y evalúa los aprendizajes por proyectos (correlación horizontal), unidades de aprendizajes o problemas relevantes (correlación en torno a una asignatura), aquí se atienden las necesida

NOTAS EN EL CONTEXTO DE LOS NUEVOS LIBROS DE TEXTO

Parte I El ámbito político ideológico Por: Mtro. en Pedagogía, Miguel Barragán de León, Director General         El Blog El Educador Reflexivo siente el compromiso de aportar algunas experiencias, saberes y conocimientos con relación al tema que actualmente es interés de todo aquel servidor(a) de la educación en México: los libros de texto gratuitos, ciclo 2023-2024.      El docente mexicano sabe que los libros de texto son un material que forma parte del diseño curricular y que este contiene elementos filosóficos, político-ideológicos, socio-económicos y culturales, entre otros. Autoridades en el diseño curricular como Hilda Taba, Ralph Tyler y en México estudiosos del mismo como los hermanos Ángel y Frida Díaz Barriga ilustran con teoría y práctica su quehacer educativo.      En esta primera parte dedicamos nuestra colaboración al aspecto político-ideológico, por así imaginar la estructura lógica del texto, sin embargo, todos son igualmente valiosos.      Para ilustrar las ideas, me

En memoria del personal del CRENA en su 50 aniversario

Por: Mtro. en Pedagogía, Miguel Barragán de León, Director General del Blog El Educador Reflexivo y ex Director del CRENA Quienes tuvimos la oportunidad de trabajar poco más de las primeras dos décadas en esta Institución Formadora de Docentes (IFD) nos vimos crecer profesionalmente, así, el propósito de este ejercicio es recordar la memoria de compañeras(os) fundadoras(es) y otras(os) que intervinieron en sentar los cimientos pedagógico-didácticos en los estudiantes normalistas de las primeras generaciones. Algunas razones que justifican este sencillo reconocimiento son: -El cariño de compañeras(os) que nos guardamos en la diaria labor académica.  -Compartir con otras(os) compañeras(os) trabajadoras(es), los nombres de quienes fueron pioneros en el Centro Regional de Educación Normal de Aguascalientes (CRENA). -Intercambiar con trabajadoras(es) contemporáneas(os) la memoria y tal vez una sonrisa, broma, anécdota, incluso alguna diferencia. -Darnos la oportunidad (si es posible) de sa